miércoles, 12 de mayo de 2010

Logorama (François Alaux, Hervé de Crecy y Ludovic Houplain)‏


La parte más difícil e interesante de todo análisis cultural, en las sociedades complejas, es la que procura entender lo hegemónico en sus procesos activos y formativos, pero también en sus procesos de transformación. Las obras de arte, debido a su carácter fundamental y general, son con frecuencia especialmente importantes como fuentes de esta compleja evidencia. Raymond Williams

Quieto ahì. Voy a contar una road movie.

Good morning live, suena en el comienzo de Logorama, el corto que ganó el Oscar en la categoría al mejor corto animado 2010. Desde el cielo vemos una maravillosa ciudad construida en base a los logos que conforman el mercado americano y que, por efecto de la globalizaciòn, todos conocemos.

Dos michelines policìas, en pleno diálogo de inspiraciòn tarantinesca comentan un paseo al zoo y sostienen una breve discusiòn acerca de cheetas enjauladas. Uno de los michelines, como es habitual en toda serie de policías made in USA, sale en busca de comida mientras el otro recibe el alerta de que hay un sospechoso. That´s right, si hay personaje temido por grandes y chicos en el universo de los logos e incluso en el universo real, ése es Ronald McDonald. Los michelines cops lo controlan por tierra y aire.

En una trama paralela, en el zoo de Los Àngeles, un instructor hace la tìpica recorrida por las instalaciones. Dos niños no resisten la visita guiada y salen a hacer su propio tour.
Mientras tanto, el camiòn de Ronald escapa de los michelines y sòlo es captado por el monitor de una estaciòn de servicio en el que trabaja una bonita señorita enfundada en un traje de Esso.

Los chicos, atrapados por un super guarda del Zoo con un miembro cubierto con la advertencia Parental Advisory que suele proteger el material explícito, montan al micro escolar con sus compañeros y salen de regreso a la misma carretera donde Ronald, descontrolado, pierde el dominio de su camión.

Los michelines cercan la zona, los niños en el pico de al adrenalina bajan del micro. Ronald toma como rehén al que lleva una t shirt de Big Boy. El chico logra escapar y se refugia en los brazos de la empleada de Esso mientras Ronald destruye los vidrios del lugar con su ametralladora.

Todo Los Ángeles se repliega: la insignia de la Paramount, el leòn de la Metro y los animales del zoo. La llegada de los escuadrones de SWAT presagia el clásico final con el tiro en la cabeza. El intento fracasa y la falla que descansa bajo las autopistas de California se hace sentir. El terremoto comienza a romper el pavimento. Todos los personajes emprenden el èxodo excepto uno de los michelines que tiene a Ronald en su radio de acciòn. Mala suerte, Ronald triunfa y empaña la pantalla de rojo.

La heroìna y el pequeño huyen en un patrullero. Ronald hace lo propio en una motocicleta pero una mala frenada lo manda al fondo de uno de los nuevos cràteres que pueblan la ciudad. Los fugitivos llegan hasta las legendarias letras de Hollywood y se precipitan por el valle.

Toda la actividad cesa, la mujer y el niño sienten que sobrevivieron pero densos escupitajos de petròleo brotan del centro de la tierra. Pronto todo flota en el petròleo y los protagonistas descansan sobre el pasto de un resto del planeta que va a hacer simbiosis con el logo de Universal, en un espacio en el que todavía subsisten Internet Explorer, Lucky Strike, Master Card y la NASA flotando en la Milky Way.

Se consigue en You Tube.

¿Razones para no verlo?

1) La estética es norteamericana, no hay riesgo artìstico del que uno esperarìa para una de las categorìas menores del Oscar.

2) Un guiòn clàsico y lleno de tòpicos. Un apocalipsis en el que las marcas son tan resistentes como las cucarachas y los dinosaurios.

3) Todos disfrutamos de la lectura de No Logo de Naomi Klein: No son las multinacionales enfocadas individualmente. Es el modelo económico que ellas representan, que mide el progreso sólo a través del "crecimiento" y de la lucratividad. Es un sistema masivo de consumismo y mensajes a través de las marcas que está presente en todos los rincones de nuestra vida del día-a-día, que invadió el espacio público y personal.

4) Todos adherimos a la lectura Yorke de No Logo.

5) 2500 marcas y mascotas taladràndote el cerebro y generando sinapsis en quince minutos son una experiencia devastadora.

¿Razones para verlo?

1) Ganò Cannes. Ganò Kodak.

2) Es una ilusiòn francesa y no una reproducciòn del american dream. No sè si los americanos hubieran plasmado un Ronald siniestro. Son los ùnicos a quienes se les ocurre que uno podrìa sentarse al lado de èl en uno de esos silloncitos de las hamburgueserìas.

3) Maldita sea, en el fondo a todos nos divierte formar parte del juego de Hollywood.

Era un observador pertinente de la realidad contemporánea pero quedaban tan pocas cosas por observar: habíamos simplificado tanto, diluido tanto, roto tantas barreras, tabúes, esperanzas erróneas, aspiraciones falsas... Michel Houellebecq

No hay comentarios:

Publicar un comentario